8 de octubre de 2008
7 de octubre de 2008
Azahar
Sin darte cuenta, el sabor de una lágrima ya no es sólo una gota de agua salada, o las notas de una canción que suena en un bar no son simples acordes. Ni siquiera es, simplemente, música. Es todo y más. Porque nosotros le ponemos significado cuando captamos esa lágrima con nuestros labios o con el roce de nuestras manos, o cuando tarareamos esa canción sintiendo todas las palabras que surgen de ella como si fueran nuestras. Porque lo son, y cuando suena "di que todo esto tan sólo es una canción..." sabemos que no lo diremos nunca porque lo que sienten nuestros ojos y ven nuestros corazones es más que eso. Es más que una serie de televisión que se emite los miércoles en prime time, es más que un producto de ficción creado por un grupo de guionistas osados, es más que dos actores recreando el papel de sus vidas, es más que una escena que acaba con un "corten!". Quizá para esos que no tienen ese "algo" lo sea, puede ser y no les culpo. Pero para nosotros, soñadores empedernidos, dueños de las nubes y de las ilusiones, para aquellos que la vida no es sólo pasar las 24 horas haciendo lo que se debe hacer... Para todos nosotros, esto es un sueño, NUESTRO SUEÑO, y como buenos soñadores que somos, nunca tendrá fin.
Algunos os preguntaréis por qué lo sé, otros seguro que tendréis vuestras propias respuestas. La mía es simple: porque les amo. Porque hice de Sara y Lucas, Lucas y Sara, algo mío desde la primera vez que les vi frente al televisor. Porque, como Sara, deseé que Lucas la amase como no había querido a nadie más y porque, como Lucas, sabía que Sara era la única persona que podía hacerle sentirse "mejor persona". Su luz, su ilusión, su candor, su esperanza... Todo lo que ellos son para nosotros. Sé que son miles las veces que os he dicho esto pero tenéis que permitirme que me repita una vez más porque ahora, pase lo que pase con Sara y esa sangre que empañaba su vestido, estarán juntos para siempre. A los ojos del dios que sea, a los ojos del mundo... Sí, ahora podemos decirlo a voz en grito. Desde aquella primera mirada cuando los Miranda se mudaban a San Antonio hasta hoy el planeta ha dado mil vueltas pero lo que sentí aquella primera vez lo sigo sintiendo hoy cuando les he visto frente al altar, cogidos de la mano, prometiéndose amor eterno con lágrimas en los ojos.
Y yo tampoco he parado de llorar, ha sido imposible detener las mil y una sensaciones que he tenido cuando ha comenzado el capítulo. Ya no sólo con la boda... ha sido con todo, con Lola, con Sara, con Silvia, con Paco, con Mariano, con Salgado... Pero, para mi asombro, sobre todo ha sido con Lucas. Nuestro Lucas. Hoy, en este último capítulo que he tenido el placer de disfrutar como nunca, lo he visto tal y como lo quería ver: entregado, feliz, ilusionado, enamorado hasta la médula... Dios mío, si cada vez que decía "me caso" con esa sonrisa y esos ojos os juro que creí que no podía ser más feliz. Que nos casamos coño, no paraba de pensar. "Marido y mujer". Lucas y Sara casados, madre mía, la de sueños y noches que he imaginado esto e iba a convertirse en realidad.
1 de octubre de 2008
Profeta
Hace unos días escribí esto en el foro de UNLU:
por Mylo el Vie Sep 26, 2008 1:53 pm
OYE Y QUÉ ME DECÍS DEL AVANCE RAMO + SANGRE + "SARAAAAA". QUÉ CREÉIS QUE PUEDE PASAR?? YO TENGO MI PROPIA TEORÍA AUNQUE ES UN POCO LIOSA, AHÍ VA: