Los ojos como tomates

Esta mañana cuando me miré al espejo casi me muero del susto. La noche había sido dura, muy dura, y eran mis pobres ojos los que habían sufrido los estragos de esa pena. Me acordé de Nur y su sms en el primer capítulo de la temporada. Entonces yo no lloré lo suficiente sino lo justo y necesario, diría que hasta poco pero bueno, ¿qué importa?, estoy segura que anoche pagué con lágrimas de sobra todos los intereses.

Dos horas con el corazón encogido. Igualito que una pasa, que una platina del bocadillo que tiras a la papelera. Igual, igual. No podía para de sollozar, ya no de llorar, sino de emitir un sollozo contínuo, incluso en los anuncios, cuando recordaba todas esas conversaciones que llevaba tanto tiempo esperando. Paco, ese Paco en el diván... ay... él fue el causante de la primera lágrima con ese: He destrozado las dos historias de amor más bonitas que he conocido en mi vida. Pum... Primera contusión en mi sensible corazón. Ay mi Paco, ahora te das cuenta? Acaso no entiendes que todos nosotros, todos los que aman Los Hombres de Paco lo saben desde hace muchísimo tiempo? Que sueñan con Lucas y Sara día sí y día también... que cuando escuchan Pignoise en la radio se ponen como locos recordando a Sara y su "tito, me llevas al cole"... Ha hecho falta un click tardío para que entiendas de una vez por todas este universo nuestro tan puro, tan bonito y que reúne a tantísima gente en todo el mundo. Al fin lo has hecho Paco, gracias, gracias, gracias.

Cómo sufría por Lucas. Veía su cara de tristeza y no podía evitar sentir su frustración y su pena. Me mordía el labio inferior y apretaba el cojín contra mi pecho para saciar la angustia. ¿Cómo estará Sara? La he dejado colgada otra vez... joder! joder! joder! Su semblante en la celda de la comisaría era un poema, sus ojos vidriosos, su palidez, sus ojeras... Ningún rostro podía expresar mejor la soledad que sentía en ese momento. Demasiado ha sufrido ya nuestro Lucas... tanto que incluso cuando disfrutamos del reencuentro en el aeropuerto de nuestra pareja nos parecía raro, casi frío e impersonal. Sara y Lucas saben sufrir pero apenas saben amarse. No están acostumbrados. Su amor tiene ya casi tres años pero sólo lo han disfrutado y saboreado 3 meses, 10 horas y 35 minutos. Nada más. Y lo peor es que ese amor también se está volviendo desconocido para nosotros, al menos para mí. Y ahora, lo único que reconozco en sus rostros es la pena y el llanto, la frustración, la ira o la tristeza. Es con eso con lo que me llegan al alma... os lo podéis creer? Es la pena lo que me hace estremecer, lo que me hace patalear, gritar y maldecir frente a la tele. El amor de Lucas y Sara está tan fuera de nuestro alcance, del suyo.. Es el precio que tenemos que pagar después de tantos meses de sequía.

Al fin, llega la llamada de Sara a la comisaría. Lucas está desesperado y el becario cotilla con la parabólica enchufada a todo trapo para ver de qué se entera. Que sí, que está preocupado por la niña pero que se vaya a joder la marrana a otro lado... que deje a nuestra Lucas, que se deje de bromitas y del manido "yo tenía razón". Basta ya Aitor. Sara jamás te ha querido y para parches que se los compre en la mercería. Tu con la Carlota que es bien maja la niña. La pobre Sara es incapaz de hablar. Cómo le miente Paco para no hacer daño a su amigo... quizá para él esté bien pero yo quería que Lucas supiera lo que estaba pasando... o quizá no? Así también se hubiera enterado el becario de pacotilla... Pobre Sara. Oye la voz de Lucas pero no le tiembla la voz: Dile a ese hijo de puta que ni se le ocurra coger el teléfono, no quiero volver a verle en la vida. (con la musiquita esa que me pone la piel de gallina...) Dile que si quiere que se venga él aquí que seguro que le reciben encantado, que yo me vuelvo a casa. (Lucas: Dile que la primera cara que va a ver cuando salga del avión va a ser la mía) Sólo dile una cosa, que no va a volver a llover nunca más. Pum. Y ya van dos... y las lágrimas cayendo a borbotones.. y mi cojín empapado, los mocos apunto de despegar y los pañuelos aguardando a mi lado.

La cruel llamada y el becario cotilla:

Y la pena continúa sin parar. Lucas deambula como un zombie de un lado a otro de la comisaría. Mientras, Paco ejerce de comisario en funciones como puede... siempre apoyado por su equipo al completo. Por cierto, tiene que ser Aitor quien encuentre siempre lo que le pide la interpol a Paco? Grrr, qué rabia me da.. es que si no le hubiera dicho nada a Lucas pues nada, pero es que eso de si no estaba morenito y blabla me saca de quicio! Menos mal que los anuncios eran breves y yo no me despegaba del sofá. Quería que llegara el momento del abrazo entre Paco y Lucas, cuando él le pide perdón y le dice que arreglará el daño que les había hecho... El momento se alargaba y alargaba. El pobre Lucas con una carita de pena que me agujereaba el alma... y unos ojos.. qué ojos... jamás, jamás en todos los capítulos de la serie, había visto a Lucas tan hecho polvo. Nunca. ¿Qué habrá querido decir Sara con "la lluvia"? Él no sabe lo que le ha dicho su niña exactamente pero lo teme. No puede evitar sentirse culpable por lo que ha pasado y la conoce... sabe que ella se enfadará y que el buen tiempo y la falta de lluvia no abarruntan nada bueno. Nada de nada.

Lucas padece la creciente sequía:




Llegó el momento que tanto esperaba y se me paró el corazón. Sabía que la escena prometía, ya en el anuncio me había emocionado con la frase de Paco... pero uf.. lo de ir juntos los domingos a comer paella a casa me tocó la fibra eh? Me quedé en blanco y con los ojos como tomates mirando la pantalla, mirando a Lucas y su cara de triste felicidad... y, de nuevo, este Paco me cogió desprevenida y me llevó a lo más alto, a la dicha más absoluta...

"Estaría encantado de llevaros a ti y a mi hija al altar algún día"

Eso sí que no me lo esperaba. Vamos, ni de coña. Fue demasiado para mí. El sollozo se convirtió en llanto a moco tentido, los pañuelos comenzaron a acumularse a mi alrededor y mi pobre novio, intentaba consolarme con su abrazo. Era imposible. Y sabéis por qué? Porque lloraba de alegría!! Fue el puto clímax del capítulo, lo que deseábamos escuchar todos algún día pero que sabíamos, por como es Paco, que no iba a ocurrir... Pero ocurrió! y fue precioso, estelar, tierno, auténtico. Lo vimos en Lucas. En su mirada. Él lo supo tan firmemente como nosotros. Lucas se casará con Sara. Ese algún día está al caer. Sara se casará con Lucas y será para siempre. Hasta la muerte. Y todos estaremos ahí para verlo.

Un suegro y su yerno hablando de hombre a hombre:



Pero nos esperaba lo peor. Lo más cruel y despiadado del capítulo. El segundo reencuentro. Sara, jodida hasta límites insospechados se encuentra con Lucas en la corrala. Él, sumido en la desesperación de verla sana y salva la abraza con fuerza. Ella ni se inmuta. Uf, eso duele. Duele más de lo que había imaginado. Porque eso significaba odio, ira y dolor. Y ni siquiera cerró los ojos. El despecho era superior a eso. Lucas lo supo al momento y se vino abajo. La había perdido por su culpa. Otra vez. Y yo me cagué en ella por no ser más comprensiva, por no preguntar qué cojones ha pasado, por ser egoísta y no cumplir su palabra. La odié por ser una niñata consentida que se mueve al son de lo que su monte de Venus le dicta. Y así no se es feliz Sarita. No, no y no. Y ahora vete con Aitor que te vas a dar un canto en los dientes mientras el que tu decías que es el amor de tu vida se va a jugar el cuello en la cárcel para cumplir la promesa.

El peor de los reencuentros:



La caída es casi mortal para nuestro Lucas. Y tira la toalla, otra vez. Lo que le ha pedido Sara es demasiado duro para que pueda cumplir. Casi imposible. Pero cuando entra en su piso y Paco explica el plan de infiltración en la cárcel para dar caza a Salazar lo ve todo claro. El que se ahora quiere ser su suegro le sirve su desaparición en bandeja. ¿Qué puede hacer ahora? ¿Esconderse en su piso y esperar a que Sara salga para que no lo vea? ¿Hacer como si no existiese la niña de sus ojos en la puerta de al lado? No, son muchas cosas imposibles de cumplir. Sólo la oferta de Paco parece ser la solución. No puede negarse, es incapaz, e incluso la suerte (o mala suerte) se pone de su parte. Cruz. Lucas cumplirá su promesa. Pelo engominado, cara de duro... nuestro héroe se pondrá su careta de hombre de acero e intentará que su mujer sea feliz lejos de él. Tocará fondo, muy profundo, y confiará en la ayuda de Paco en el exterior para recuperar a Sara. ¿Será capaz Paco de hacer reaccionar a la niña?

¿Cara o cruz?:

Lucas conoce a quienes le quieren abrir la puerta del garaje:

El avance lo deja claro. Paco habla con Sara y hay abrazo. En los rumores que aparecieron al comienzo de temporada se decía que Sara se alegraría al oir que su padre ha cambiado de opinión. Sí, pero hasta que punto? Vemos en que Lucas llamará a Sara, ella lo cogerá pero al oir su voz cogará súbitamente. Dios mío... cómo se quedará Lucas en medio de tanto caos?? Podrá soportarlo? Otra imagen que me quita el sueño: Aitor y Sara. Él le canta las cuarenta a la niña y también hay beso, no sé si antes o después (espero que antes). Y al final, Sara en la cárcel visitando a Lucas, se levanta llorando y se va. Él, hecho un loco grita su nombre mientras dos guardas se lo llevan dentro. ¿Qué pasará? Mi cabeza no deja de dar vueltas intentando buscar una explicación.


En el próximo capítulo... ay, ay, qué escenita nos espera en la cárcel:



Creo que lo tengo. O, bueno, es cree mi cabecita loca. Lucas intentará hablar con Sara a toda costa pero le será imposible. Ella no da su brazo a torcer. Paco hablará con Sara y le contará todo lo que pasó entre Mariano y Lucas. La pondrá al tanto de la infiltración y lo que ha hecho Lucas para que ella no sufra. Sara se arrepentirá de lo que ha hecho, le dirá a su padre que le quiere pero que no sabe si será feliz con él. Paco le pedirá que vaya a verle. Ella accede y en la cárcel le suelta la milonga de que quiere estar sola, que es una niñata que sólo ha hecho daño a la gente que quiere, que necesita saber lo que realmente desea hacer en la vida, que quiere estar sola y pensar en su futuro.. Le dirá a Lucas que la olvide y tendrá lugar la escenita de los llantos.

Pignoise: "¿Qué es lo que estamos haciendo, que nos estamos rindiendo?

Ay.. lo que nos queda por sufrir amigos y amigas. Yo con la panzá de llorar que me pegué el martes ya he cumplido para toda la semana. En fin, que esto es una despedida, bueno, un hasta luego. El por qué? Bueno, el domingo cojo un avión hacia Pekín para comenzar mi vida allí. Sí, esta vez es de verdad Nur! Así que el martes veré el tercer capítulo de la temporada a través del ordenador a las 8 de la mañana, justo cuando Antena 3 lo haya colgado en su web. Espero que se vea! si no tendré que esperar al emule... uf, demasiado tiempo! Creo que he solucionado los problemas de la censura de blogger en China y podré actualizar el blog a través del mail. Mis entradas ya no serán tan bonitas y estéticas pero espero que mis palabras llenen el hueco que falta en esa distancia tan grande que nos va a separar. Ay.. qué nervios! Gracias, gracias, gracias por todo. Sois los mejores.

Nos vemos en China!